Cada día más gente recomienda el colecho, pues es beneficioso tanto para el bebé, que se siente en todo momento junto a sus padres, como para los padres, especialmente la madre, que los primeros días no puede evitar esa necesidad de estar cerca de su bebé, verlo y sentir cómo respira y duerme plácidamente. Aparte de que, para las madres que han optado por la lactancia materna, es mucho más cómodo puesto que puedes alcanzar a tu bebé sin necesidad de incorporarte (gesto banal que, sin embargo, la primera semana después del parto puede requerir mucho esfuerzo…). Por otro lado, a muchos padres les gusta meter al bebé en su cama, inconscientes quizá de los riesgos que ello entraña: las cunas de colecho son la solución perfecta, pues la cunita del bebé es como una prolongación del espacio dentro de la cama de sus padres.
Mareando por la red he encontrado esta cuna de colecho que, además, me encanta por su diseño: Bednest, una cuna única que permite dormir juntos a los padres y al bebé de forma segura, se acopla fácilmente a cualquier tipo de cama y se puede regular en altura. Además, es perfecta para utilizar como moisés (dejando las paredes subidas), como capazo (quitándole las patas, para llevar de un lado a otro de la casa) o como cuna de viaje, puesto que se pliega y transporta fácilmente en su bolsa. Como veis, se trata de una cuna muy segura, pues va fijada a la estructura de la cama de los padres, evitando así que se mueva de su sitio. ¡Adiós al miedo de que el bebé se ‘cuele’ por el hueco que queda entre la cama y la cuna! En cualquier caso tiene, además, la posibilidad de subir el lateral de la cuna hasta la mitad, para bebés que se mueven mucho.
La encontraréis en: su página de venta on-line (es de Reino Unido, pero hacen envíos a casi todo el mundo). En España la encontraréis también en Ekoideas.
-María
