Cumpleaños infantil: ¡a hacer el indio!

Mi hija mayor cumple años el 16 de mayo pero, hagamos lo que hagamos, todos los años nos diluvia (de ahí que organizáramos una fiesta de la lluvia para celebrar el primer cumpleaños de la pequeña), y este año las previsiones eran que volvería a llover… así que organizamos una fiesta de indios con la clara intención de ponerles a hacer la danza de la lluvia si el tiempo no aguantaba 😉

Todos los años nos liamos a hacer sandwiches y bocaditos de mil tipos y al final se quedan casi todos en la mesa, así que este año fuimos directos a lo que sabíamos que triunfa: chocolate, chuches, y sándwiches de jamón y queso y nocilla. Pinterest es un peligro para organizar cumples… ¡ves de todo y quieres copiarlo todo! Como los donnetes ensartados en flechas que son una versión de esta idea original y que luego repliqué con las nubes.

Desde que descubrí los zumos los pongo todos los años; este año los decoré con este papel que encontré en Tiger y que me había encantado por el colorido que tiene. Además era un rollo de papel autoadhesivo, ¡perfecto para decorar aquí y allá!

No puede haber fiesta de indios sin tipi, ¿no os parece? Este se lo trajeron los Reyes Magos a mis hijas este año; prometo ponerme las pilas y haceros un tutorial pronto…

Sé que a veces me lío demasiado (mi pobre marido es el encargado oficial de hacer los sandwiches porque al final siempre me pilla el toro con la decoración…¡algún día aprenderé a organizar las cosas con tiempo!), pero me gusta que los invitados se lleven algún recuerdo del cumple. Si a eso le unes que me encanta coser, y los disfraces caseros, el resultado es una bomba de relojería que explotará en el momento en que me toque invitar a todos los amigos del colegio de alguna de mis hijas… Tenía en mente hacer unas plumas de indio para que los invitados se metieran en el papel, y en cuanto vi las que hizo Begoña, de Tea on the moon, para el cumpleaños de su hijo (¡eso sí que es un cumpleaños de indios bien montado! ¿lo habéis visto?) me apasionaron. Aunque no lo parezca, son muy facilitas y rápidas de hacer.

Y a los niños les encantaron. La tarta es obra de mi prima, que es una artista de las tartas de cumpleaños e hizo esta tarta tipi que dejó a todo el mundo con la boca abierta ¡y que voló de lo rica que estaba! La base era una tarta de chocolate y galletas, y el relleno del tipi también.

Y como fin de fiesta: la piñata, ¿cómo les puede gustar tanto? Atrás quedaron los cumpleaños en los que cogían un caramelo y ya les parecía todo un logro, ¡ahora los pequeños de la casa son los que más chuches consiguen!

Y sí, como veis en las imágenes, llovió lo que no está escrito por la mañana, pero por suerte por la tarde despejó y pudimos salir al jardín a que corrieran y jugaran, que al fin y al cabo es donde mejor lo pasan los niños.

-María