Lo cierto es que la receta de salsa de pesto ha entrado tarde en mi vida y casi, casi, de forma forzosa: no es algo que nunca se haya comido en casa de mis padres ni algo que me diera por comer en restaurantes, pero en viajes al extranjero en los que literalmente no me gustaba nada más empecé a probar los sandwiches de pollo con pesto, bastante típicos en Europa (y ahora cada vez más aquí), y así es cómo me enganché a esta salsa tan versátil y que puedes utilizar en un montón de platos.
Hoy os quería contar cómo hacer salsa de pesto casera: la verdad es que también se puede comprar esta salsa ya preparada, pero dónde esté el pesto recién hecha que se quite todo lo demás 😉
Os dejo con la receta y al final del post os contaré un par de trucos curiosos y os daré ideas de recetas con salsa de pesto.
Ingredientes:
50 gramos de hojas de albahaca (aprox)
4 cucharadas de piñones
2 dientes de ajo
1/2 vaso de aceite de oliva virgen extra
115 gramos de queso parmesano recién rallado
25 gramos de queso pecorino o queso de leche de oveja curado recién rallado
Modo de hacer
1. Lo primero es triturar la albahaca, los ajos y los piñones hasta conseguir una pasta más o menos homogénea.
Yo suelo utilizar la Thermomix para hacer este paso porque soy así de «rapidilla», pero podéis utilizar un mortero, que es la forma tradicional de preparar la pasta. Es más, como curiosidad, os contaré que la palabra pesto procede del término genovés «pestare«, que significa machacar o moler en un mortero.
2. A continuación hay que añadir el aceite poco a poco, batiendo de forma continuada para conseguir que emulsione correctamente.
3. Añadir el queso parmesano y el pecorino o queso curado y remover.
4. Por último, salpimentar en caso de ser necesario y habremos terminado: salsa de pesto casera lista para añadir a vuestras recetas.
Y no quiero terminar sin contaros también un par de trucos interesantes que saqué del blog Sabor Mediterráneo, en el que encontré la receta:
// UNO //
Si queremos que la salsa al pesto sea más sabrosa, se le pueden añadir un par de cucharadas de nata líquida y mezclarlas con la salsa;
// DOS //
En cambio, si lo que pretendemos es que la salsa sea más ligera, se puede mezclar el pesto con una o dos cucharadas del agua en la que hemos hervido la pasta.
Nosotras pronto publicaremos en el blog una receta de pasta con esta salsa y otra para hacer un aperitivo rico y rápido con un poco de pesto, pero me encantaría saber si preparáis habitualmente pesto en casa o si lo compráis hecho y con qué recetas lo combináis 😉
PD: Humus casero, mi pizza casera preferida y tortilla de patatas en tempura estilo Chicote… ¡riquísima!
