Como sabéis, estamos un poco desconectadas del blog, aunque conectadas a través de Instagram (@mar_bebestilo & @maria_bebestilo). Hoy, que me he desvelado a las 5 de la mañana y ya estaba harta de dar vueltas en la cama intentando dormirme sin éxito, he querido pasar un ratito por aquí para enseñaros más fotos de la playa de Olhos d’Agua, en Albufeira (en la zona del Algarve Portugués), donde he pasado la primera semana de este mes de agosto en compañía de mi familia.
Somos 6 hermanos. Y algunos nos hemos casado y hemos tenido niños. Total, que con mis padres, hermanos, cuñadas y sobrinos sumamos nada más y nada menos que 23 personas. Todos los años mis padres, que son los mejores (¡¡gracias papis!!) nos invitan una semana a algún sitio para que estemos todos juntos.
Este año, el destino escogido ha sido el Algarve, en Portugal, y pese a que he ido muchas veces de pequeña, cuando bajamos del hotel a la playa de Olhos ‘dAgua me quedé impresionada de los paraísos que tenemos a un paso de casa y que no conocemos. Además, estoy descubriendo otras playas en la zona a través de personas a las que sigo en Instagram y definitivamente creo que volveré el año que viene.
Olhos d’Agua es un pequeño pueblecito dentro de la ciudad de Albufeira. La verdad es que la bajada a la playa tenía su historia, ya que está entre acantilados y para ir a la zona más bonita había que bajar bastantes escaleras, lo que se complica con niños, bebés, carritos, etc, pero después de ver la playa el primer día decidimos que el esfuerzo bien merecía la pena y bajamos casi todos los días.
Calas, pinos, acantilados, agua limpia y un paisaje lunar que parecía sacado de una película. Por más fotografías que hice (aquí incluyo sólo unas poquitas porque la conexión que tengo es una patata :P) creo que no le hacen justicia a lo bonita que era la playa.
Quizás por inesperada, porque no esperaba encontrarme ese tipo de playa, ha sido de las playas en las que he estado que más me han gustado, y he estado en unas pocas ya 😀
Ya os podéis imaginar que era un poco cómico ver a veintitantas personas “en procesión” bajando a la playa por las escaleras con carrito incluido (mi Bugaboo Bee viene conmigo a todas partes, esta vez como #Beeinthebeach y no #Beeinthecity) o dando un paseo por la orilla, y ya ni os cuento pidiendo mesa en el hotel para comer o cenar (se asustaban cada vez que nos veían aparecer)… La verdad es que lo hemos pasado muy muy bien y han sido unas mini vacaciones increíbles.
Después he pasado unos días en la playa de La Antilla, en Huelva, y ahora mismo estoy en la Playa de San Juan, en Alicante, ¡un verano muy movido pero muy completo! Como podréis comprobar por las fotografías que estamos compartiendo en Instagram, tanto María como yo estamos disfrutando mucho de nuestras respectivas familias y de las vacaciones, que es lo que toca. Eso sí, con portátil a cuestas y sacando ratitos para intentar avanzar con todos los proyectos que tenemos en mente, que quien algo quiere algo le cuesta y seguro que no somos las únicas que estamos con el portátil en la maleta, ¿verdad?
– Mar
