Hace un par de meses nos mandaron la nueva silla de paseo Pop de Silver Cross para que la probáramos y desde entonces la llevamos a todos lados para poder daros nuestra opinión. Antes de nada, os cuento que la nueva Pop 2013 se reclina entera por lo que se puede usar con niños de 0 a 25 kg, pesa 6,4 kg e incluye capota, cestillo y burbuja para la lluvia. ¿La vemos más a fondo?
Cuenta con un arnés de cinco puntos de sujeción con dos alturas de hombro para que los niños sigan igual de cómodos a medida que van creciendo. El arnés es muy fácil de enganchar y soltar; para soltarlo, basta con apretar el botón blanco circular que veis en la imagen; para engancharlo, tendréis que insertar cada uno de los lados en ese mismo círculo blanco.
El reposapiés también tiene dos posiciones: recto, para que los niños vayan más cómodos si se quedan dormidos, por ejemplo, o si son aún pequeños, y plegado para niños algo mayores. Pasar de una posición a otra es tan fácil como apretar la pestaña que encontraréis a cada lado del reposapiés (imagen del medio).
Como os decía, el respaldo se reclina completamente y, en realidad, tiene tantas posiciones como se quiera, pues no tiene posiciones fijas sino que tú decides cúando parar. En la imagen de la izquierda os enseño cómo hacer para subir el respaldo (no tenéis más que tirar de la cinta para hacia vosotros); en la de la derecha, cómo reclinarlo (levantad la pestaña un poco y bajad el respaldo hasta la altura deseada). ¿La verdad? Es uno de los mecanismos más fáciles y cómodos que conozco.
El único conveniente que le veo a este tipo de reclinados es que, como no es fijo, si el niño es algo mayor (como mi hija), al incorporarse el respaldo se incorpora con ella. En la imagen, por ejemplo, tenía el respaldo completamente reclinado… y ya veis que mi hija se lo lleva entero al incorporarse. No es un inconveniente como tal, pues el niño no se siente «atrapado» en ningún momento, pero es verdad que con niños más pequeños, si no te esperas que pueda hacer eso, te puedes llevar un sustillo pensando que se va a caer (evidentemente, no, pues para eso está el arnés).
La capota me encanta. Es muy amplia y tiene dos detalles que siempre me han parecido un puntazo en las sillas de paseo: la ventanita para que entre aire y para que los padres podamos ver al niño, y la visera que sale de la capota para tapar ese sol incómodo que no hay manera de quitarles de la cara…
La silla se pliega como casi todas las de sillas de tijera: tiras de la cuerda, pisas el pedal que encontrarás a la derecha (con fuerza, hasta que haga ‘clic’) y empujas hacia delante para que se doble del todo. ¿Para abrir? Suelta el tope que hay a la izquierda de la silla, pues sino no habrá manera de abrir la silla, levanta la silla tirando del manillar hacia ti y y pisa el centro de la cruceta hasta el fondo. ¡Lista para usar!
En definitiva, es una silla de paseo muy completa y cómoda para usar en el día a día, y que podéis encontrar en tiendas especializadas a un PVP de unos 215€.
-María