Ayer tuve la suerte de estar en la presentación de productos Tommee Tippee, una marca que ya conocía y que me encantaba, pero que no deja de sorprender con sus innovaciones. Por ello, me temo que este post va a ser algo más largo de lo normal… ¡pero es que no puedo evitarlo! ¡Me gustan toooodos sus productos!
Tommee Tippee tiene tres gamas: Closer to nature, Explora y Sangenic; cada una de ellas dedicada a una etapa o producto en particular.
‘Closer to nature‘ hace hincapié precisamente en eso: en estar lo más cerca posible de la naturaleza, fomentando la lactancia materna con sus extractores manuales o eléctricos y de copa blanda y flexible o de silicona, los discos de lactancia y la gran novedad: los discos refrescantes con hidrogel de tecnología avanzada que ayuda a evitar y curar las temidas grietas, además de enfriar, calmar y refrescar los primeros días de lactancia.
Dentro de la misma gama podéis encontrar los baberos para lactancia, que me encantan por el reborde del cuello, suave y mullido, especialmente pensado para absorber toda la humedad de las babas y restos de leche… ¡di adiós a cambiar cada dos por tres la ropa empapada de tu bebé!
Dentro de los biberones Closer to Nature, 100% libres de Bisfenol A, nos presentan la serie AntiColic +, diseñados especialmente para que las burbujas de aire no entren en contacto en ningún momento con el líquido, evitando así que el bebé las ingiera y termine esos horribles cólicos que a todas nos espantan. Cuentan, además, con una caña termosensible que cambia a rojo si la leche está a más de 37ºC.
Me gustan especialmente los dispensadores de leche en polvo, que aunque no son una novedad de la marca, me parecen un invento ingenioso, práctico y que ocupa poco espacio (tres características a las que ya sabéis que soy adicta). Son unos dispensadores pensados especialmente para meter dentro del biberón del bebé, con o sin agua, manteniendo la cantidad de leche en polvo que previamente hayas preparado siempre seca y segura.
Y, por último, los chupetes: mi hija Blanca se aferra a su chupete Tommee Tippee como un náufrago a su madero. Por suerte para mí, han sido desarrollados por el dentista pediátrico David Tesini, y proporcionan un diseño intuitivo que ayuda al desarrollo bucal del bebé, aparte de que las tetinas están hechas de silicona, que por experiencia personal me parecen más limpias e higiénicas que las de látex.
Explora abarca todos los productos para los primeros sólidos, potenciando la capacidad de tu hijo a beber y comer solito. Sus vasos a prueba de goteo cuentan con la tecnología Advance-Flo™, para evitar que se derrame el contenido del vaso, y con una Válvula Active Sensor, extremadamente sensible y que permite la salida del líquido ‘a demanda’, sin que tu hijo necesite hacer más esfuerzo del normal para poder beber.
Ayer volví a casa con una taza Active Sipper para Blanca… ¡y prueba más que superada! Se pasó la tarde entera feliz con su vaso rosa, bebiendo agua como loca (¡menos mal que aún lleva pañal!) y enseñándosela a todo el que pasaba a su lado. La boquilla se puede intercambiar con la de las tazas Active Straw y Active Sporty, así que ya sé cuál va a ser mi próxima adquisición: ¡así podrá beber agua como papá cuando se van los dos en bici!
También me gustan mucho sus cucharillas: de punta blanda, largas (para llegar mejor al fondo de los potitos), de diseño ergonómico (pensadas para que la punta no toque la mesa, así se mantienen limpias) y termosensibles, para que no se quemen con las prisas. ¡Y su Magic Mat! Perfecto para viajar, pues se enrolla y no abulta nada, y para mantener los cuencos y platos en su sitio, evitando esos ‘accidentes’ que terminan con el puré esparcido por toda la ropa de tu hijo… ¡no me creo que mi hija sea la única ‘terrorista’ en ese sentido!
Por último, Sangenic, con sus dos contenedores de pañales: Hygiene Plusy el nuevo Nursery Essentials, que incluye la tecnología wist-lock™ que envuelve individualmente cada pañal en un film de plástico antibacteriano y aísla los olores hasta una semana. El contenedor tiene una capacidad máxima de 28 pañales, por lo que te ahorras viajes al contenedor de la calle (porque recuerdas lo mal que huelen los pañales de un bebé, ¿verdad?).
¡Pero ahí no acaba la cosa! No dejéis de visitar su página web, donde encontraréis información de todos los productos de esta fabulosa marca, aparte de consejos prácticos para madres y padres, primerizos y no tanto, o su Club Mamá y Bebé.
-María
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