Como ya os he contado otras veces, me encanta cocinar con mis niños. Bueno, por ahora, cocina conmigo mi hija mayor, que tiene 3 años y medio, y el pequeñajo, de un año y medio, se sienta en la trona y nos mira y picotea como un pajarito todo lo que le voy dando (he probado a meterle las manos en la masa, pero lo de ensuciarse las manos por ahora no va con él…). Sin duda, una de las mejores recetas para cocinar con niños es hacer galletas caseras: amasan, aplanan con el rodillo, hacen todo tipo de formas… ¡y luego les encantan! Pensando, pensando, no recordaba haber escrito ninguna entrada con la receta de las galletas que suelo utilizar así que… ¡aquí la tenéis!
Tengo la suerte de tener la Thermomix en casa, y la receta que uso es la que podéis encontrar en el blog Velocidad Cuchara, todo un referente de recetas para Thermomix, así que simplemente me limito a replicar una receta original de Sofía Martín más algunos consejos sugeridos por Bea de El Rincón de Bea que podéis encontrar en Velocidad Cuchara.
Aquí os dejo la receta tal y como yo la hice…
Ingredientes*
* Para 40 galletas, yo eché justo la mitad de los ingredientes de todo para hacer menos cantidad y me quedaron muy bien.
225gr de mantequilla a temperatura ambiente (muy importante que no esté fría)
240gr de azúcar glas (pesado previamente y mejor comprado)
2 cucharadas de esencia de vainilla o similar
una clara de huevo
400gr harina normal (es mejor tamizarla o pasarla por un colador junto a la maicena)
50gr de Maicena
una pizca de sal
Modo de hacer
1. Añadir la mantequilla al vaso y batir 1 minuto en velocidad 3. Al terminar, parar la TMX, bajar con la espátula lo que hay en las paredes y batir de nuevo 1 minuto en velocidad 3.
2. Poner la TMX en velocidad 1 sin programar tiempo, y e incorporar a cucharadas el azúcar glass. Cuando el azúcar ya esté integrado, volver a subir a velocidad 3. Cuando pase este tiempo la mantequilla tendrá una textura esponjosa.
3. Añadir al vaso la esencia de vainilla y la clara de huevo, y batir a 1 minuto en velocidad 1 ó hasta que esté integrado. (Recordad que si van quedando ingredientes en las paredes del vaso hay que ir parando la TMX e ir poniéndolos en el vaso con la espátula).
4. Programar la TMX a velocidad 3, sin tiempo y añadir a cucharadas la harina tamizada con la maicena, con la máquina en funcionamiento.
5. Cuando ya hayas conseguido una masa uniforme, colocar sobre la encimera un papel de hornear y sobre él la masa de las galletas. Dale a la masa forma redonda y córtala en cuatro trozos iguales (En mi caso fueron dos trozos porque eché la mitad de los ingredientes). En este punto os aviso que mi masa no quedó demasiado uniforme, sino como desintegrada en bolitas, pero la amasé un momentito en el papel de hornear y quedó perfecta.
6. Ahora un truco básico que no me conocía las primeras veces que hice galletas y que me vino muy bien y que cuentan en Velocidad Cuchara: poner uno de los trozos de masa entre dos papeles de hornear (en el medio) y estirar la masa con un rodillo de forma que quede un rectángulo, más o menos del largo del papel de hornear (claro, yo al principio lo hacía sin papel arriba y la masa se pegaba siempre al rodillo 😉
7. En la receta original recomiendan que, una vez se tenga el grosor de masa deseado (aprox 0,5 cm), se guarde en la nevera y se deje enfriar como mínimo 3 horas, e idealmente de un día para otro. Como yo voy siempre corriendo y soy una impaciente, la verdad es que hice las galletas sin seguir esta recomendación y me quedaron muy bien, pero eso sí, la recomendación ahí os la dejo para que vosotros, que seguro que sois más pacientes, la podáis seguir.
8. Precalentar el horno a 180ºC.
9. Cortar las galletas con cortadores (yo incluso hice algunas redondas con un vaso, como la que podéis ver en la receta de smoothie de fresa que os enseñé el otro día)
8. Precalienta el horno a 180ºC.
9. Para evitar que se rompan, usar una espátula para coger las galletas y colocar en bandeja de hornear dejando 2 cm entre cada galleta.
10. Hornear 10 min mínimo a 180º C e ir revisando cómo están quedando (a partir de 15 min las galletas se pueden quemar fácilmente, así que hay que estar muy pendientes.
11. Al sacar del horno, y todavía calientes, se despegan de la bandeja usando la espátula con cuidado y se dejan reposar (se endurecerán).
12. Si queréis decorarlas (o congelarlas, que también se puede), dejar enfriar 2 horas al menos, y lo mejor es guardarlas en una caja metálica para que se conserven bien (podéis ver más trucos y consejos de Bea en el post original en Velocidad Cuchara o en su blog El Rincón de Bea).
13. En mi caso, y como antes habíamos estado pintando bigotes (si os fijáis veréis que con las prisas se me rompió el mostacho ;), sombreros y corbatas con chocolate, como os conté en el post de pintar y decorar con chocolate, esperamos a que nuestras ilustraciones con chocolate enfriaran y luego «pegamos» nuestros dibujos con mucho cuidado calentando un poquito más de chocolate a modo de pegamento y poniendo un poquito en la galleta con un palillo de dientes. También se puede utilizar glasa para decorarlas, a ver si un día de estos me animo y os cuento en Bebestilo la receta (mientras me animo os dejo una receta para hacer glasa para decorar galletas, también de Velocidad Cuchara).
Bueno qué… ¿nos animamos con las galletas y los niños o no nos animamos? ¿Vosotros también las hacéis a menudo? ¿Alguna receta que os guste más y queráis compartir con nosotras?
– Mar
