Todos en Niños

#healthymomcamp: ¡Empezamos!

Carina 1

Primero conocimos a Carina a través de su Instagram: e inmediatamente nos engancharon sus fotografías y su forma de vivir la maternidad y de contárnoslo. Luego coincidimos con ella en Madrid y confirmamos lo que ya sabíamos: que es una tía encantadora y que queríamos conocerla un poco mejor. Después fue alumna de Hello! Creatividad y nuestros caminos se terminaron de unir. Nos hace especial ilusión presentárosla hoy como nueva colaboradora de Sonambulistas. Estará con nosotros y con vosotros dos veces al mes, y como lo hace mejor que nadie, ella misma nos presenta su sección: #healthymomcamp.

Si leísteis en Sonambulitas las 15 cosas que no sabíais de Carina tal vez os acordéis de que dije que una de las cosas que cambié al ser madre fue el pasar de no hacer nada y ser totalmente sedentaria, a ser una madre activa, apasionada por las costumbres, la vida sana y una loca del gimnasio. Y por esto último es por lo que os estoy escribiendo esto ahora.

Toda la vida he estado descontenta con mi cuerpo (a pesar de que siempre me he mantenido bien de peso y mas bien tirando a delgadita). De hecho, hice todas las dietas que os podéis imaginar, esperando siempre un milagro. Cuando me quedé embarazada de Lola, empecé a comer como una loca, y fruto de ello engordé 22 kilos… casi nada 😀

Una vez Lola nació, y cuando fui capaz de reunir el valor para mirar mi barriga, me asusté de verdad:

me sentía como si mi cuerpo fuese un globo desinflado y durante un buen tiempo pensé y asumí que esa era mi nueva realidad.

Me imagino que muchas de vosotras habréis pasado, o estéis pasando por lo mismo, e incluso tengáis en la cabeza eso de que una vez eres madre «esto es lo que hay» y viene como parte del «pack».

En las infinitas horas que estuve dando el pecho, me enganché a Instagram, y empecé a seguir a muchas personas que habían cambiado sus hábitos y su estilo de vida, y fue ahí donde arrancó lo que hoy se convertido en una pasión, y que finalmente me dio el cuerpo que durante tantos años había querido tener.

Ser una persona activa me llena de energía, me hace más feliz y me convierte en una mejor madre para mis hijos, ¡mucho mas dispuesta a afrontar lo que me echen!

Si realmente queréis dar el paso y cambiar, then, let’s do it together!!!

{Montessoring Nº 3} Crear un ambiente preparado según María Montessori

   ambiente preparado montessori

Mi casa es como el Santo Sepulcro de Jerusalem. Bueno, va, lo tengo que explicar porque los que me conocéis sabéis que aquí ni somos muy santos ni escondemos sepulcros. Es por algo que yo aprendí en las guías de viajes (¿os acordáis de las Let´s Go o las Routard? Nostalgia pretecnológica, perdón…) en un viaje a Israel. En el Santo Sepulcro está decretado el Status Quo: nada de las zonas comunes se puede cambiar si no hay un acuerdo entre las distintas comunidades que lo regentan. Y por eso hay una escalera de madera en la fachada que quedó ahí tras decretarse dicho Status Quo y que no se ha movido desde 1757.

Y ahí está el paralelismo: aquí no se cambia niente. Nuestra escalera son los dibujos colgados de las paredes de Emma. Desaparecen cuando se despega el washi tape. Vaya, como ocurrirá con la escalera: por erosión. Pero he resuelto escribir este post porque sé que muchos de los que os pasáis por aquí tenéis una capacidad EXTRAORDINARIA para darle una vuelta a la casa. Y como se nos ocurrió esta iniciación a Montessori, qué mejor que empezar por crear un ambiente preparado para nuestros niños, que les permita desarrollarse de forma autónoma y sin la asistencia constante de un adulto.

ambiente preparado montessori

Siendo Montessori un método en esencia respetuoso con el niño, lo primero para crear un ambiente preparado es ponerse en su lugar. De ahí que una de las recomendaciones para mi gusto más bonitas, es que a la hora de preparar el ambiente de los niños, nos pongamos a su altura. Sí, literalmente. Nos agachamos y miramos para ver el mundo con sus ojos y poder entender mejor sus necesidades.

Happy birthday, my litte boy!

sonambulistas

Mucho me temo que no es ningún secreto que se me cae la baba con mi chico. Y mira que me esfuerzo por que no se me note demasiado, pero reconozco que me ha pillado blandita… ¡y me da una pena enorme que se haga mayor!

Hoy hace un año que llegaste a nuestras vidas, y no pasa un sólo día sin que dé las gracias a Dios por ello; por ti, y tus dos hermanas. Por tener tres niños sanos, alegres y felices. Sobre todo felices. 

Llevo un rato buceando en el mar de fotos que tengo de este último año así que me vais a perdonar el post ñoño, pero si hay un común denominador en casi todas las fotos es esa mirada suya, mezcla de admiración, pasión y «prepárate-Bosco-que-esta-no-tiene-idea-buena» cada vez que está con alguna de sus hermanas. Me encanta cómo analiza cada cosa que hacen. Que se crea mayor aunque siga siendo un mico, y que reclame su huequecillo cuando juegan ellas juntas y le dicen eso de «Bosco, tú no, que esto es de mayores». Me encanta cómo se le ilumina la cara cada vez que oye sus voces, cómo las busca cuando vamos a recogerlas al colegio y las jalea cuando ve que no le están haciendo caso. Me encanta escuchar sus carcajadas con cada tontería que le dicen. Los saltitos que pega en su cuna cuando ve que se van todos a la cama al tiempo (qué gran decisión la de haberles metido a los tres a dormir juntos). Me encanta que, aunque sus hermanas no le dejan ni a sol ni sombra, y haya aprendido a defenderse aún siendo un pequeñajo, para él no haya plan más divertido que ser su muñeco. 

Happy birthday, my little boy! Ojalá sigáis teniendo esa relación tan especial tus hermanas y tú toda la vida, porque creo que los hermanos son el mejor regalo que os podíamos haber hecho nunca.

-María

Feliz primer cumpleaños, pequeña

Hoy mi pequeña Adriana cumple 1 añito. Es su primer año de vida. Y mi primer año siendo su madre. Ha sido un año increíble: cansado, eso sí, porque compatibilizar trabajo, este blog y tres niños no es pan comido, pero increíble igualmente: doy gracias cada día por tenerlos en mi vida y haber tenido la suerte de ser su mamá.

Muchas felicidades pequeña. Por muchos más cumples a tu lado. 

22 juegos para hacer en casa con niños

22 juegos para hacer en casa ¡Buenos días!

Martes ya y yo que pretendía publicar este post ayer… ¿soy yo o 2015 va a toda velocidad?

No sé qué tiempo tendréis vosotros, pero en Madrid estamos teniendo unos días bastante lluviosos y parece que esta semana la cosa va a estar igual… En casa seguimos con la política de dejar que se aburran y por eso me ha encantado ver este vídeo de Nuria: definitivamente, se tienen que aburrir 😀

De todas formas, son muchas horas en casa y también intento proponerles juegos nuevos, porque al final hasta se aburren de sus propios juguetes, y la verdad es que tampoco cuesta tanto hacer de vez en cuando cosas un poco distintas.

Por eso, quería compartir con vosotros algunos juegos para hacer en casa con niños que he encontrado por ahí, más que nada por si también os toca hibernar en casa con los enanos estos días:

{Montessoring Nº 2} Introducing Montessori

método montessori

Una de esas tardes en las que Mar y yo compartimos vivencias vivo un déjà vu. ¿Os acordáis de cuando me “animó” a elaborar una lista de 30 libros infantiles? Pues esa tarde, en el parque, con el oído y el ojo que me quedan libres, escucho que me dice algo así como: “las diez razones -o las que sean- por las que elegiste el método Montessori para tus hijas”. Yo, que ya tenía un post rondándome por la cabeza, empiezo a balbucear razones por las que no hacerlo. Pero mi instinto a psicoanalizarme me da la respuesta a por qué me encuentro reacia a escribir mis razones, que va más allá de la pereza, que también existe, por tener que empezar con otra idea: No quiero hacer proselitismo. Buffff. Yo soy abanderada del vive y deja vivir. Pero entiendo que Mar, lista como un rayo, me inste a crear la génesis del tema para tener un punto de partida. Y me termino convenciendo al pensar que el conocimiento es la gran herramienta para cambiar el mundo. Cuanto más sepamos de otros modelos educativos, más podremos ponerlos en práctica nosotros mismos si nos gustan y más podremos exigir cambios en el sistema educativo para el beneficio de nuestros niños. Ya hay “rincones Montessori” en muchas aulas de colegios y por algo será. Así que, permitidme este post en el que cuento un poco cómo se trabaja en un aula Montessori y que refleja los motivos por los que a mi me convenció.

Tengo que re-avisar de que mi aproximación al método no es el de una experta, ni mucho menos, sino el de una madre satisfecha con la experiencia. Y lo que veo y he aprendido es lo que os puedo contar. Una experiencia real. Nosotros no hacemos Montessori en casa, pero sí intentamos educar teniendo en mente sus principios. A veces, incluso reúno el valor necesario (porque es sólo apto para valientes y yo soy un poco floja) para tratar de educar en las grandes virtudes de las que hablaba la escritora Natalia Ginzburg en su maravilloso ensayo “Las Pequeñas Virtudes”: “Por lo que respecta a la educación de los hijos, creo que no hay que enseñarles las pequeñas virtudes, sino las grandes. No el ahorro, sino la generosidad y la indiferencia hacia el dinero; no la prudencia, sino el coraje y el desprecio por el peligro; no la astucia, sino la franqueza y el amor por la verdad; no la diplomacia, sino el amor al prójimo y la abnegación; no el deseo del éxito, sino el deseo de ser y de saber”. ¿Cómo os quedáis?

Aprendiz de lectora

la hora del cuento

Cuando, en la primera tutoría que tuve con la profesora de mi hija, me dijo eso de «estamos empezando a leer y no le vendría mal reforzar un poco la lectura en casa, para que gane confianza», la miré no sin cierta incredulidad. ¿Mi hija? ¿Leer? ¡Pero si hasta ahora a lo único que juega es a escribir letras sin sentido en un papel y a inventarse lo que ha escrito! Y yo tan contenta, no creáis, que sé que cada niño lleva su ritmo y, además, estábamos a principio de curso. Pero reconozco que me hizo gracia. Empezamos a fomentarle que fuera ella quien leyera en casa, cosas pequeñitas, pero sin forzarla. Al principio leía dos o tres palabras, medio deletreándolas, y se cansaba.

Disfraces de carnaval y el paraíso de los niños

disfraces de carnaval Imaginarium 6

disfraces de carnaval Imaginarium 4

Os pongo en situación: martes, cuatro y media de la tarde, Bosco se declara en huelga de siesta (últimamente lo hace mucho… lo de dormir no va con él, ¡qué le vamos a hacer!) así que me lo cargo a la cadera (y luego me extraño de que me duela la espalda) y voy corriendo a recoger a las otras dos. Chispea. Qué digo chispea: para cuando llego al colegio lo que cae es lluvia, así, con todas las letras. A estas alturas del partido, cualquier otra tarde ya habría empezado a tirarme de los pelos… pero ese martes no, ese martes, por suerte, teníamos un plan. Mentira, «un plan», no: EL plan. EL planazo. Fiesta de carnaval en Imaginarium. Y ahora dime que no quieres volver a ser niño…

¿Os imagináis? Cinco años, entras en tu tienda de juguetes, esa de la que tienen que sacarte a rastras cada vez que vas, y te dicen las palabras mágicas: «¿de qué quieres disfrazarte?». Y ves allí, ordenaditos, un montón de disfraces: superhéroes, princesas azules y rosas, caballeros, reinas y reyes, Peter Pan y el Capitán Garfio, El mago de Oz, Caperucita Roja, Alicia en el País de las Maravillas…  ¿me tomas el pelo? La cara de mi hija era un cuadro. Al final, Dorothy, de El mago de Oz, es el elegido. 

{Montessoring nº 1} Hoy Floristas

montessoring def

Como padres del siglo XXI, creo que tenemos un deber que a la vez es una necesidad: intentar estimular el desarrollo y la creatividad de nuestros hijos todo lo que podamos para que tengan la capacidad de adaptarse, de aprender y de innovar. María Montessori fue una educadora italiana que desarrolló un método para liberar el potencial de cada niño y ayudarle a conseguir un desarrollo integral. Y es que si un método se basa en el respeto hacia los niños y su capacidad para aprender, sin duda quiero conocerlo a fondo.  Mi amiga Marta conoce bien el método Montessori y ha elegido un colegio con este modelo educativo para sus hijas, y muchas tardes, cuando quedamos, hacemos actividades basadas en esta filosofía educativa para que los niños pasen un buen rato y aprendan cosas diferentes mientras nosotros nos sorprendemos al ver que son capaces de mucho más de lo que creemos.

Me parecía muy interesante contaros un poco cómo son esas tardes basadas en el método Montessori y que ella nos contase a todos más sobre la filosofía que encierra esta metodología y por eso hoy arrancamos nueva sección con Marta como colaboradora. Por eso hoy, y sin pretender ser puristas del método, ya que lo único que pretendemos es presentar alternativas para pasar tiempo en familia de forma diferente y aprender un poco más sobre las ideas de este modelo educativo, arranca en el blog Montessoring, ¡esperamos que os guste la idea tanto como a nosotras y que os animéis a poner en práctica estas actividades con vuestros niños!

Y hasta aquí mi parrafada habitual, ahora os dejo con Marta…

Algún día dejaré de estar por aquí. Os sitúo en escena. Mar, con toda esa energía desbordante y la que suscribe, ensimismada en su vida contemplativa. Mar, con su capacidad para hacer cuatro cosas a la vez y yo para desmembrar una idea en cuatro fases. El jueves pasado llegó Mar a casa dispuesta a dar de merendar a los niños, hacer las fotos para el post de hoy, tener nuestra sesión particular de MM & Talk y hacer la obra de teatro con los niños que le había propuesto. En mi caso, yo estaba dispuesta a crear el decorado de la obra, period. Y luego en tres quedadas más, tener listo el atrezzo, ensayar y ensayar y finalmente en el cuarto día hacer la representación. Uhmmmm. Pero los polos se atraen: yo admiro tremendamente su capacidad de idear y lo más difícil, de poner en práctica esas ideas y Mar me tiene como esa amiga dedicada a reflexionar cual monja laica de clausura que parece bastante feliz. Y así nos queremos. Supongo entonces que nos seguiremos viendo por aquí.

montessori - flores

Por eso me deja hacer cuando le propongo la idea para hoy. Sin artificios ni florituras.

Un arreglo de flores que nada tiene que ver con los de Boutemy, sino más bien con los de nuestras abuelas en sus pequeños jarroncitos recolectados a lo largo de los años.

Soy madre entusiasta del método Montessori y esto da para mucho más, lo sé, pero lo dejamos para otros días. Gracias a Mar he aprendido que los blogs también se leen en diagonal y no hay que divagar en exceso. Yo hasta hace poco sólo leía uno llamado Sonambulistas y miraba hasta las comas. Ahora que leo alguno más comprendo que hay que intentar que tu blog sea como las noticias internacionales y no las páginas de sucesos de El País. A mí no me sale, ya veis.

Si yo tuviera 5 años también querría unas así

zapatillas luces sketchers

¿Habéis visto por ahí estas zapatillas para niños? En casa han sido el regalo estrella de las Navidades para Mar. Tanto juguete tanto juguete y, al final, lo que más ilusión le ha hecho son estas zapatillas con luces de Sketchers, iguales que las de su amiga Emma.

El mecanismo es sencillo: al pisar un poco fuerte la zapatilla emite destellos de luz de colores muy «cantosos», para que nos entendamos. Al comentárselo a mi marido, me preguntó si «en serio» le íbamos a comprar esas zapatillas a la niña. Yo le contesté lo siguiente: «Si yo tuviera 5 años también querría unas así, ¿tú no?»

Molan, ¿eh?

PD: 30 libros infantiles que nos recomendaba Marta, la mamá de Emma y colaboradora del blog 😀